Basilique Saint-Michel es una iglesia ubicada en Burdeos, cuyo origen se remonta al Siglo XIV. Es un sitio del Patrimonio Mundial con una impresionante aguja de 114 metros de altura que se ve desde el río Garona. El campanario fue separado de la catedral en el Siglo XIX, aunque también hay una capilla dedicada a Saint Jacques y otra para Santa Ursula. Dentro hay hermosos vitrales modernos y antiguos, un organo de tubos y columnas decoradas con estatuas. Los jueves hay conciertos en verano y también un mercado de pulgas afuera. Se puede ver desde lejos el perfil del edificio o subir a la torre para disfrutar la vista espectacular de la ciudad. Esta iglesia es única por sus vidrieras, su historia profunda y sus inusuales detalles arquitectónicos, lo que la convierte en una parada obligatoria para los turistas que visitan Burdeos.
¿Qué hacer en Basilique Saint-Michel? ¿por qué visitarla?
1. Explora la Basilique Saint-Michel y admira su impresionante arquitectura y vidrieras.
2. Escala el Campanario de 374 pies para disfrutar de una magnífica vista de Burdeos.
3. Visita el mercado callejero los viernes en la plaza frente a la Iglesia.
4. Participa en algunas de las exposiciones variadas de temáticas que ofrece esta Basilica
Recomendaciones:
1. Asegúrate de verificar los horarios antes de visitar la Basilica para aprovechar al máximo tu tiempo allí.
2. Trae cómodos zapatos para escalar el Campanario, ya que hay 247 escalones desde el nivel del suelo hasta la cima.
3. Ten cuidado con los muchos pasos, abrir una puerta puede ser tentador pero también peligroso si no tienes cuidado.
4. Si vas durante el verano, disfruta de los conciertos organizados los jueves en la Iglesia por José Merklin del Siglo XIX